Espectáculo de drones ilumina el cielo de Pamplona
Pamplona celebró el sexto centenario del Privilegio de la Unión con un espectáculo de drones que cautivó a miles de espectadores. Doscientos drones iluminaron el cielo sobre la Ciudadela para representar diez escenas en honor al histórico decreto promulgado por Carlos III el Noble en 1423, que unificó los tres burgos enfrentados de la ciudad.
El espectáculo, organizado por el Ayuntamiento de Pamplona y desarrollado por Umiles Entertainment, dejó a la audiencia asombrada con su creatividad y belleza visual. Cada uno de los drones, equipado con luces LED, fue coreografiado para formar diversas imágenes en el aire, acompañadas por música que evocaba los momentos clave de la historia de Pamplona.
Las escenas, que permanecieron en secreto hasta el momento de la presentación, representaron momentos emblemáticos relacionados con el Privilegio de la Unión. Desde el símbolo del trifolio de Carlos III hasta el icónico león del escudo de Pamplona, los drones llevaron a los espectadores a un viaje a través de los siglos, destacando la importancia de la unión y la convivencia en una ciudad que alguna vez estuvo dividida por murallas y rivalidades.
La alcaldesa de Pamplona, en su discurso durante el evento, señaló: «Este espectáculo es un tributo a nuestra historia y un homenaje a la capacidad de adaptación de nuestra ciudad a los nuevos tiempos. Queremos que los ciudadanos sientan orgullo de nuestra herencia y vean cómo hemos crecido como comunidad».
El público, que abarrotó los alrededores de la Ciudadela en ambas noches del espectáculo, no pudo ocultar su asombro y entusiasmo. «Es como si la historia cobrara vida en el cielo», exclamó uno de los espectadores emocionados. Otro comentó: «Este evento es una manera única de conectar con nuestro pasado y apreciar cómo hemos avanzado como sociedad».
La combinación de historia y tecnología de vanguardia logró crear una experiencia inmersiva que dejó una impresión duradera en la ciudad y sus habitantes. El espectáculo de drones marcó un hito significativo en la historia de Pamplona, demostrando que la innovación puede honrar y resaltar las tradiciones arraigadas en la identidad de una comunidad.