Navarra ha experimentado un notable aumento en la generación de empleo indefinido durante el año 2022, multiplicando por cinco las cifras del año anterior. Según datos recopilados por el Observatorio de la Realidad Social en el informe «Efectos de la Reforma Laboral en Navarra: más empleo y de mayor calidad», presentado por la consejera en funciones de Derechos Sociales, Carmen Maeztu, se registraron 24.258 cotizantes fijos más, alcanzando un total de 174.249 afiliados.
La reforma laboral, apoyada por el Gobierno, la patronal CEOE y los sindicatos UGT y CCOO, comenzó a aplicarse en un contexto de crecimiento económico, con un aumento del 4,3% del PIB foral en 2022, y en medio de desafíos como la inflación disparada, problemas en la cadena de suministro y pérdida de poder adquisitivo. A pesar de estas dificultades, Navarra logró superar los 300.000 cotizantes por primera vez el año pasado, priorizando la contratación indefinida sobre la eventual.
Del total de nuevos cotizantes indefinidos, el 55% corresponde a trabajadores a jornada completa, mientras que el 25% se encuentra en empleos a jornada parcial y el 20% se considera fijos discontinuos. Este último grupo ha generado controversia debido a que, incluso cuando están inactivos, siguen siendo contabilizados como cotizantes, lo que altera la cifra de desempleo en momentos puntuales.
En cuanto a la distribución de la contratación indefinida entre hombres y mujeres, se observa que hubo un incremento de 8.303 hombres a jornada completa, en comparación con 4.984 mujeres. En el caso de los contratos a jornada parcial, se contabilizaron 3.940 mujeres más y 2.125 hombres más en empleos indefinidos, mientras que en los fijos discontinuos, las mujeres alcanzaron 2.731 afiliaciones y los hombres llegaron a 2.200.
Los sectores de servicios e industria concentran la mayor cantidad de contratos indefinidos en números absolutos. Sin embargo, si se compara el porcentaje de contratos indefinidos sobre el total generados por cada actividad, se observa un aumento significativo en el peso de los contratos indefinidos en la agricultura y la construcción. En la agricultura, por ejemplo, en 2021 solo el 5% de los contratos eran indefinidos, mientras que en 2022 esta cifra se elevó al 41%. En la construcción, la proporción pasó del 18,3% al 58,3%.
El informe destaca que la reforma laboral ha mejorado las condiciones laborales de la población, incrementando el número de contratos indefinidos de 24.808 en 2021 a 73.137 en 2022. Además, ha contribuido a la reducción de la tasa de temporalidad, pasando del 23,54% en 2021 al 16% en 2022. El estudio también señala que los jóvenes y las mujeres han sido los grupos más beneficiados por estos cambios.
La consejera Carmen Maeztu enfatizó que los cambios introducidos por la reforma laboral han permitido un crecimiento continuo en la afiliación y un incremento sostenido de las personas con contratos indefinidos en la Comunidad Foral de Navarra. Además, resaltó el notable aumento de los contratos indefinidos entre los jóvenes de 16 a 24 años, con un incremento del 396,6%. Este dato es especialmente relevante, ya que refleja las consecuencias positivas de la reforma en uno de los principales problemas del mercado laboral en el país: la precariedad laboral de los jóvenes. El segundo grupo que más se ha beneficiado son las personas mayores de 55 años.