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Navarra se posiciona como la segunda Comunidad más longeva de España

El Departamento de Salud del Gobierno de Navarra ha presentado a la Comisión de Salud del Parlamento foral la evaluación del Plan de Salud de Navarra 2014-2020, cuya vigencia ha finalizado. Con este motivo, el departamento iniciará la creación de un nuevo plan con horizonte en 2030, mediante un proceso de participación pública. Entre los principales retos de este nuevo plan se encuentran: culminar la integración asistencial centrada en la persona y su entorno, promover la investigación e innovación con una perspectiva inclusiva, y alcanzar la excelencia en la humanización del sistema de salud y sociosanitario navarro.

Según el Gobierno, la evaluación, retrasada por la pandemia de COVID-19, ha sido elaborada con base en los indicadores definidos en el plan por el Servicio de Planificación del departamento, con la participación de los comités técnicos de seguimiento del Plan de Salud.

Principales resultados de la evaluación

El plan se estructuró en 12 estrategias de salud, compuestas por 52 programas y 250 acciones clave, de las cuales se ejecutaron el 74%. Se lograron importantes avances en áreas como la promoción de estilos de vida saludables, la prevención de enfermedades crónicas, la atención a grupos vulnerables y el empoderamiento en el autocuidado. Entre los indicadores destaca la reducción de la mortalidad por cáncer en Navarra, con un descenso del 21% en hombres y del 15% en mujeres desde 2014.

Las estrategias de prevención fueron efectivas en muchos casos, como lo demuestra el control del cáncer de cuello de útero, cuya incidencia apenas ha crecido un 0,1% en los últimos 20 años. Navarra también lidera la participación en el Programa de Detección Precoz de Cáncer de Colon, con un 76,8%, lo que ha contribuido a estabilizar la mortalidad prematura por esta enfermedad, con una disminución del 23% en hombres y del 32% en mujeres en los últimos cinco años.

Se observó una reducción significativa en el consumo de tabaco (29% en hombres y 10% en mujeres) y en el sedentarismo (20% en hombres y 14% en mujeres) entre 2014 y 2020. Navarra también destaca como la segunda comunidad más longeva de España, con una esperanza de vida de 84,8 años y 80,9 años de vida saludable.

En cuanto a la satisfacción de los pacientes, mejoraron aspectos como la calidad de la información recibida en Atención Primaria, con una valoración de 8,3 sobre 10.

Elena Antoñanzas, directora del Servicio de Planificación, Estrategia Sanitaria e Investigación, señaló que el Plan de Salud prioriza las estrategias que más contribuyen a mejorar la salud de la población y enfatiza la evaluación y monitoreo de los avances. Además, subrayó que se ha promovido la transparencia mediante la creación de un sistema integral de información pública.

Integración asistencial

Entre 2014 y 2020, se destacaron iniciativas como la prevención y atención al cáncer, el programa de Atención a la Cronicidad Compleja en Infancia, la atención a pacientes pluripatológicos, y la promoción de una atención humanizada al nacimiento y la lactancia en 14 centros de salud y 3 hospitales públicos. También se avanzó en la atención a trastornos mentales graves y se desarrollaron modelos avanzados de atención, como la cirugía mayor ambulatoria, que incrementó sus intervenciones un 35%, y la atención domiciliaria, que creció un 200%.

La colaboración interinstitucional fue clave para el éxito de programas comunitarios de salud, envejecimiento saludable y protección a la infancia vulnerable. Además, se implementaron herramientas como la Historia Clínica Integrada (ANDIA), la Carpeta Personal de Salud, la telemonitorización, y la Base de Análisis de Resultados de Navarra (BARDENA).

Impulso a la investigación

El Departamento de Salud fomentó la investigación a través de subvenciones y publicaciones como la revista Anales del Sistema Sanitario de Navarra. Desde 2013, Navarrabiomed, gestionado por la Fundación Miguel Servet, ha liderado la investigación, y en 2019 el Instituto de Investigación de Navarra (IDISNA) fue acreditado por el Instituto de Salud Carlos III. El número de investigadores públicos creció un 70% en este periodo.